Hoy hablaremos de los beneficios de llevar con nosotros personas especializadas en el lugar y de perfil turístico, gente experta que nos llevará por una visita guiada.
Adelantamos, como siempre, que no se puede generalizar y que seguramente no todos los guías turísticos tengan todos los puntos que vamos a resumir a continuación. De la misma manera, también habrá guías que tengan más cosas positivas que las que nosotros consideramos así. Lo cierto es que nunca estará de más.
También hay que contar con el precio y los recorridos, pero eso siempre podremos consultarlo en Internet. Allá vamos con las diez razones para contratar un guía turístico:
1. Nos lleva a los puntos señalados por la ruta, por lo que podremos conocer varios lugares en poco tiempo. Con ello nos ahorraremos tener que mirar el plano, perdernos o distraernos. “El tiempo es oro”.
2. Nos contará datos interesantes sobre el lugar, que a no ser que seamos personas muy cultas o hayamos leído mucho antes de ir, no sabremos. La historia, política, literatura, arte o naturaleza puede dar mucho de sí. Hace tiempo hablamos de los beneficios del turismo a nivel personal y sin duda, el conocimiento es uno de ellos.
3. Seguridad. Si estamos en un país que no conocemos muy bien, el guía nos hará compañía y nos llevará por sitios seguros.
4. Nos ayudará con datos relevantes del turismo de la ciudad, como a qué hora cierran los museos, si hay que reservar para ver algún lugar o qué barrios son los mejores para salir por la noche. Un guía turístico local es como una persona de la ciudad, una fuente de muchos conocimientos sobre ella. Esta es una razón muy importante por los que contratarlos.
5. Son ideales para viajes cortos, en los que solo podemos ver pocas lugares. Nos llevará a los lugares más emblemáticos y rápido.
6. Conoceremos a otra gente. Las visitas guiadas son en grupo y es una posibilidad de conocer a personas en nuestra misma situación: con ganas de conocer la ciudad y compartir experiencias.
7. Pueden motivar a conocer más la ciudad. Para explicar mejor esta razón voy a volver a mi experiencia personal. Este fin de semana pasado fui a Berlín e hicimos un tour por la ciudad, concretamente el conocido Free Tours, que se caracteriza porque si no te gusta el recorrido no pagas nada y si quieres, das la cantidad que te parezca. El guía turístico que me tocó nos habló de películas, libros y música relacionadas con la ciudad. Eso hizo que al llegar a casa solo pensase en investigar un poco más sobre ello.
8. Ir a los lugares más escondidos. No todas, pero algunas agencias de viajes o tours van a aquellos lugares más particulares y no tan conocidos. Como tampoco salen normalmente en las guías en papel, esta es otra razón de peso para contratar un guía turístico que te lleve por rutas alternativas.
9. Flexibilidad. Las excursiones en los viajes son una actividad ineludible y si lo hacemos con un guía especializado casi siempre disponemos de muchos horarios y recorridos.
10. Reflexión. Quizás sea este el punto que distinga un buen guía turístico de otro que no lo es, pero si quién te lleva por la ciudad, te hace pensar lo que dice, te hace imaginar que lo que te cuenta ocurrió allí y te remueve algo por dentro, será un guía excelente. Y los hay. Algo parecido al turismo espiritual, pero muy terrenal.
Imagen: Flickr
Fuente de información: mundoturistico.es
